¿Quieres perder peso? Toma el sol

Las células de grasa blanca que se encuentran debajo de la piel-. Según sus estudios, estas células tienden a reducirse bajo el efecto de la denominada “luz azul del sol” (la que podemos ver con nuestro ojo).

Según el director del estudio, Peter Light, “cuando las longitudes de onda de la luz azul del sol penetran en nuestra piel y alcanzan las células de grasa justo debajo, las gotas de lípidos disminuyen de tamaño y se liberan de la célula. Es decir, nuestras células no almacenan tanta grasa”.

¿Cómo te influye la luz del sol?
En invierno, todos entramos en un déficit de sol, que se traduce directamente en una falta de vitamina D. Se calcula que el 50% de la población está en riesgo por una carencia estable. Sin vitamina D, los huesos no funcionan adecuadamente, se incrementa el riesgo de osteoporosis y también se ve afectadas ciertas funciones metabólicas. 

Además, no olvides que con el sol se reajusta nuestro reloj interno: nuestro ritmo circadiano si se desprograma puede provocar baja respuesta inmune, pérdida de sueño, obesidad… 

Se recomienda una exposición diaria a sus rayos de entre 30 y 45 minutos. Mejorará tu salud y tu estado de ánimo: por ejemplo, en los países nórdicos se incrementan los casos de depresión en invierno, lo que se cataloga como “trastorno estacional afectivo”, debido a que la carencia de luz solar acarrea menos producción de serotonina y melatonina. 

Vía: Womenshealth